Esperar

 

¿Para qué Dios utiliza la espera?

 

·                      Entonces el Eterno dijo a Moisés: "Sube a mí al monte, y espera allá, y te daré tablas de piedra con la Ley y los Mandamientos que escribí para instrucción de ellos". (Éxodo 24:12)

·                      Cuando llegaron al extremo de la ciudad. Samuel dijo a Saúl: "Di al criado que se adelante". Y el joven se adelantó. "Y espera tú un poco para que te declare palabra de Dios". (1 Samuel 9:27)

 

Consecuencia

 

-                     Dios utiliza la espera antes de comunicarse con los hombres

 

·                      Ahora cantaré por mi amado el cantar de mi amado acerca de su viña. Tenía mi amado una viña en una ladera fértil. La había cavado, despedregado y plantado de vides selectas. Había edificado en ella una torre y un lagar. Y esperaba que diese uvas, y dio uvas silvestres.

 

Consecuencia

 

-                     Dios utiliza la espera para probar a los hombres

 

·                      Sin embargo, el Eterno esperará para tener piedad de vosotros, y será exaltado para compadecerse de vosotros; porque el Señor es Dios de justicia. ¡Dichosos los que esperan en él! (Isaías 30:18)

 

¿Existieron hombres que esperaron en Dios?

 

·                     José de Arimatea, miembro del Concilio, que también esperaba el reino de Dios, fue osadamente a Pilato, y pidió el cuerpo de Jesús. (Marcos 15:43)

·                     Había en Jerusalén, un hombre llamado Simeón, justo y piadoso, que esperaba el consuelo de Israel.  Y el Espíritu Santo estaba sobre él. (Lucas 2:25)

·                     Un hombre bueno y justo, llamado José, miembro del Consejo, no había consentido en el acuerdo ni en los hechos de ellos.  Era de Arimatea, ciudad de Judea, y esperaba el reino de Dios. (Lucas 23:50-51)

·                     Encamíname en tu verdad y enséñame, porque tú eres el Dios de mi salvación, en ti he esperado todo el día. (Sal. 25:5)

·                     Por la fe Abrahán, cuando fue llamado por Dios, obedeció para salir al lugar que había de recibir por herencia. Y salió sin saber a dónde iba. Por la fe habitó como extranjero en la tierra prometida como en tierra ajena. Y habitó en tiendas con Isaac y Jacob, coherederos de la misma promesa. Porque esperaba la ciudad con fundamentos, cuyo arquitecto y constructor es Dios. (Hebreos 11:8-10)

·                     Nosotros esperamos en el Eterno; nuestra ayuda y nuestro escudo es él. (Sal. 33:20)

 

¿Debemos esperar en Dios?

 

·                     ¡Espera en el Señor! ¡Esfuérzate, y aliéntese tu corazón! ¡Espera al Eterno! (Sal. 27:14)

·                     Espere Israel al Eterno, porque en él hay constante amor, y abundante redención. (Sal. 130:7)

·                     Espera, oh Israel, en el Eterno, Desde ahora y para siempre. (Sal. 131:3)

·                     Pero el Eterno es Dios Todopoderoso, el Eterno es su Nombre. Tú, pues, conviértete a tu Dios, guarda el amor y la justicia, y en tu Dios espera siempre. (Oseas 12:5-6)

·                     Esperad en, él en todo tiempo, oh pueblos, derramad ante él vuestro corazón. Dios es nuestro refugio. (Sal. 62:8)

·                     En ese día se dirá: "¡Este es nuestro Dios! Lo hemos esperado, y nos salvará. Este es el Eterno a quien hemos esperado, nos gozaremos y nos alegraremos en su salvación". (Isa. 25:9)

·                     Siendo que todo será destruido, ¿qué clase de personas debéis ser en santa y piadosa conducta, esperando y acelerando la venida del día de Dios?  En ese día los cielos serán encendidos y deshechos, y los elementos se fundirán abrasados por el fuego. (2 Pedro 3:11-12)

 

¿En qué debemos esperar?

 

·                     Espero al Eterno, mi alma espera; en su Palabra espero. Mi alma espera al Señor más que los centinelas a la mañana, más que los vigilantes a la mañana. (Sal. 130:5-6)

·                     !Ay de la ciudad rebelde, contaminada y opresora! No escuchó la voz, ni recibió la disciplina; no confió en el Eterno, ni se acercó a su Dios. Sus príncipes son leones rugientes; sus jueces, lobos nocturnos que no dejan hueso para la mañana. Sus profetas son insolentes, prevaricadores; sus sacerdotes contaminaron el Santuario, falsearon la Ley. El Eterno en ella es justo, no hace iniquidad. Cada mañana saca a luz su juicio, nunca falta. Pero el injusto no tiene vergüenza. "Destruí naciones, sus torres están asoladas, sus calles desiertas, hasta no quedar quien las transite. Sus ciudades están asoladas hasta no quedar nadie, hasta quedar sin habitante. "Dije: Ciertamente me temerá, la disciplina recibirá. Entonces su morada no será destruida, ni su castigo vendrá sobre ella. Pero ellos se apresuraron a pervertir todas sus obras. "Por tanto, esperadme —dice el Eterno—, hasta el día en que me levante como testigo. Porque mi determinación es reunir a las naciones, juntar a los reinos, para derramar sobre ellos mi enojo, todo el ardor de mi ira. Por el fuego de mi celo será consumido el mundo entero". (Sofonías 3:1-8)

·                     También en el camino de tus juicios, oh Eterno, te hemos esperado. Tu Nombre y tu memoria son el deseo de nuestro corazón. Con mi corazón te he deseado en la noche, y con todo mi espíritu te busco en la madrugada. Porque cuando hay juicios tuyos en la tierra, los habitantes del mundo aprenden justicia. (Isaías 26:8-9)

·                     El Eterno me respondió: "Escribe la visión, y declárala en tablas, para que se pueda leer de corrido. "Porque la visión es para el tiempo fijado. Llegará a su fin, y no fallará. Si tardara, espérala, que sin duda vendrá, y no fallará. "El orgulloso no es recto en su interior, pero el justo vivirá por su fe. "Así como el vino es engañoso, el hombre soberbio no permanecerá. Se ensancha como el sepulcro y como la muerte, que no se harta. Reúne para sí a todas las naciones, acapara a todos los pueblos". "¿No han de levantar todos refrán sobre él, sarcasmos contra él?  Dirán: '¡Ay del que amontona bienes robados, y se enriquece mediante la extorsión! "¿No se levantarán de repente tus acreedores, y se despertarán, y te harán temblar?”Por cuanto tú has despojado a muchas naciones, los otros pueblos te despojarán a ti, a causa de la sangre vertida de los hombres, y los robos de la tierra, de las ciudades y de todos sus habitantes. "¡Ay del que edifica su casa con ganancia injusta, para poner alto su nido, y escapar del poder del mal!”Tomaste consejo vergonzoso para tu casa al asolar a muchos pueblos, y pecaste contra tu propia vida. "La piedra desde el muro clamará, y la tabla del enmaderado le responderá. "¡Ay del que edifica la ciudad con sangre, y la funda con iniquidad! "¿No ha determinado el Eterno Todopoderoso que los pueblos trabajen para el fuego, y las naciones se fatiguen en vano?” Pero la tierra se llenará del conocimiento de la gloria del Eterno, como el agua cubre el mar. ¡Ay del que da de beber a su prójimo! ¡Ay de ti que le acercas tu hiel y lo embriagas, para mirar su desnudez! "Te has llenado de deshonra más que de honra. Bebe tú también, y serás descubierto. La copa de la diestra del Eterno volverá sobre ti, y vómito de afrenta sobre tu gloria. "Porque la violencia efectuada en el Líbano caerá sobre ti, y la destrucción de las bestias te quebrantará; a causa de la sangre derramada de los hombres, y de la violencia cometida en el país y en la ciudad contra sus habitantes. (Habacub 2:2-17)

 

¿Para qué utilizar la espera?

 

·                     No digas: "Yo me vengaré"; espera al Eterno, y él te salvará. (Prov. 20:22)

·                     La viña del Eterno Todopoderoso es la casa de Israel, y los hombres de Judá planta suya deliciosa. Esperaba juicio, y hubo asesinatos; justicia, y hubo clamor. (Isa. 5:7)

·                     Pero nuestra ciudadanía está en el cielo, de donde esperamos ansiosamente al Salvador, al Señor Jesucristo, (Filipenses 3:20)

·                     La fe es estar seguros de lo que esperamos, y ciertos de lo que no vemos. (Hebreos 11:1)

·                     Pero, según su promesa, esperamos un cielo nuevo y una tierra nueva, donde habita la justicia. (2 Pedro 3:13)

·                     Sabemos que hasta el presente, todas las criaturas gimen a una, y a una sufren dolores como de parto. Y no sólo ellas, sino también nosotros, que tenemos la primicia del Espíritu, suspiramos dentro de nosotros, esperando la adopción, la redención de nuestro cuerpo. (Rom 8:22-23)

 

¿Cómo debemos esperar?

 

·                     Descansa en el Eterno, y espera con paciencia en él. No te impacientes por el que prospera en su camino, por el hombre que hace maldad. Deja la ira y abandona el enojo. No te impacientes, que eso sólo conduce al mal. (Sal. 37:7-8)

 

Pero si esperamos lo que no vemos, con paciencia esperamos. (Rom 8:25)

 

Hermanos, tened paciencia hasta la venida del Señor.  Mirad cómo el labrador espera el precioso fruto de la tierra. Aguarda con paciencia hasta recibir la lluvia temprana y tardía. (Sant. 5:7)

 

·                     Espera en el Señor, y guarda su camino, y él te exaltará para heredar la tierra. Cuando los pecadores sean destruidos lo verás. (Sal. 37:34)

·                     ¿Por qué te abates, oh alma mía, y te turbas en mí? Espera a Dios, porque aún he de alabarlo. ¡Mi Salvador y mi Dios! (Sal 42:11)

·                     El avaro se apresura a ser rico, y no sabe que le espera la pobreza. (Prov. 28:22)

·                     El amor es sufrido,... Todo lo espera. Todo lo soporta. (1 Corintios 13:7)

·                     La viuda de verdad es la que ha quedado sola, que espera en Dios, y es diligente en súplicas y oraciones día y noche. (1 Timoteo 5:5)

 

·                     Por la fe Abrahán, cuando fue llamado por Dios, obedeció para salir al lugar que había de recibir por herencia. Y salió sin saber a dónde iba. Por la fe habitó como extranjero en la tierra prometida como en tierra ajena. Y habitó en tiendas con Isaac y Jacob, coherederos de la misma promesa. Porque esperaba la ciudad con fundamentos, cuyo arquitecto y constructor es Dios. (Hebreos 11:8-10)

·                     Abrahán creyó, esperando contra toda esperanza, para venir a ser padre de muchas naciones, según le había sido dicho: "Así será el número de tus descendientes". (Rom 4:18)

·                     Vuestro adorno no sea exterior con peinados ostentosos, atavíos de oro, o vestidos lujosos, sino interno, del corazón, en incorruptible belleza de un espíritu manso y tranquilo, que es de gran valor ante Dios. Así se ataviaran en otro tiempo las santas mujeres que esperaban en Dios, y estaban sujetas a sus esposos. (1 Pedro 3:3-5)

·                     ¡Esforzaos todos los que esperáis en el Eterno, y aliéntese vuestro corazón! (Sal. 31:24)

·                     "Y si hacéis bien a los que os hacen bien, ¿qué mérito tenéis?  También los pecadores hacen lo mismo. Y si prestáis a aquellos de quienes esperáis recibir, ¿qué mérito tenéis?  También los pecadores prestan a los pecadores, para recibir otro tanto. Amad, pues, a vuestros enemigos, haced bien y prestad, sin esperar de ello nada.  Y vuestro galardón será grande, y seréis hijos del Altísimo; porque él es benigno aun con los ingratos y malos. Sed, pues, misericordiosos, como vuestro Padre es misericordioso.” (Lucas 6:33-36)

·                     porque en él fuisteis enriquecidos, en toda palabra y conocimiento; así como el testimonio de Cristo ha sido confirmado en vosotros, de tal manera que no os falte ningún don, mientras esperáis la manifestación de nuestro Señor Jesucristo. El os guardará vigorosos hasta el fin, para que seáis irreprensibles en el día de nuestro Señor Jesucristo. Fiel es Dios, que os llamó a la comunión con su Hijo Jesucristo, nuestro Señor. (1 Corintios 1:5-9)

·                     Pero, según su promesa, esperamos un cielo nuevo y una tierra nueva, donde habita la justicia. Por eso, oh amados, ya que esperáis estas cosas, procurad con diligencia ser hallados en paz con él, sin mancha ni reprensión. (2 Pedro 3:13-14)

·                     ¿Hay entre los ídolos de las naciones quien haga llover? ¿Dará el cielo lluvia? Oh Señor, ¿no eres tú nuestro Dios? En ti esperamos, porque tú eres el que hace todo esto. (Jeremías 14:22)

·                     Detesto a los que esperan en los vanos ídolos, pero yo en el Eterno confío. (Sal. 31:6)

·                     El Eterno se complace en los que lo respetan, en los que esperan en su constante amor. (Sal. 147:11)

·                     Bueno es esperar en silencio en la salvación del Eterno. (Lamentaciones 3:26)

·                     El estuvo atento, esperando recibir algo de ellos. (Hechos 3:5)

 

Precauciones que tienen que tener los que esperan

 

·                     "Y sin embargo, cuando yo esperaba el bien, me vino el mal, cuando esperaba luz, me vino la oscuridad. (Job 30:26)

·                     "Esperabais mucho y hallasteis poco. Aun eso que guardáis en casa, yo lo disipo con un soplo. ¿Por qué? —dice el Eterno Todopoderoso—. Por cuanto mi casa está en ruinas, y cada uno de vosotros se apresura a edificar sólo su propia casa. Por eso el cielo detuvo de vosotros la lluvia, y la tierra detuvo sus frutos.” (Ageo 1:9-10)

·                     ¿Has desechado, oh Dios, del todo a Judá? ¿Has aborrecido a Sión? ¿Por qué nos hiciste herir sin que haya remedio? Esperábamos paz, y no hubo bien; esperábamos sanidad, y vino turbación. Reconocemos, oh Eterno, nuestra impiedad y la iniquidad de nuestros padres. Hemos pecado contra ti. Por amor de tu Nombre no nos deseches, ni deshonres la gloria de tu trono. Acuérdate, no invalides tu pacto con nosotros. (Jeremías 14:18-21)

·                     ¡Ay de ti, destructor, que nunca fuiste destruido! ¡Ay de ti, traidor, que no has sido traicionado! Cuando acabes de destruir, serás tú destruido. Cuando acabes de traicionar, serás traicionado. Oh Señor, ten piedad de nosotros, en ti hemos esperado. Tú, brazo de ellos en la mañana, sé también nuestra salvación en tiempo de la tribulación. (Isaías 33:1-2)

·                     Manteneos en el amor de Dios, mientras esperáis que la misericordia de nuestro Señor Jesucristo os dé la vida eterna. Sed compasivos con los que dudan. A otros salvadlos, arrebatándolos del fuego; a otros mostradles compasión, aborreciendo aun la ropa manchada por la carne contaminada. (Judas 21-23)

·                     Todos esperan en ti, para que les des su comida a su tiempo. (Sal. 104:27)

 

Los ojos de todos esperan en ti, y tú les das su comida a su tiempo. (Sal. 145:15)

 

Consecuencias de no esperar en Dios

 

·                     "Pero si aquel siervo fuera malo, y dijera en su corazón: 'Mi señor se tarda en venir'. "Y empezara a herir a sus consiervos, y a comer y beber con los borrachos; "vendrá el señor de aquel siervo en el día que no espera, a la hora que no sabe, "lo castigará, y lo pondrá con los hipócritas. Allí será el llanto y el crujir de dientes". (Mateo 24:48-51)

·                     Porque si voluntariamente seguimos pecando después de haber recibido el conocimiento de la verdad, ya no queda más sacrificio por los pecados, sino una horrenda espera del juicio y del furor del fuego, que ha de devorar a los adversarios. (Hebreos 10:26-27)

·                     La mano del Eterno no se acortó para salvar, ni se agravó su oído para oír, sino que vuestras iniquidades os han separado de vuestro Dios, y vuestros pecados han ocultado su rostro de vosotros para no escuchar. Porque vuestras manos están contaminadas de sangre, y vuestros dedos de iniquidad. Vuestros labios pronuncian mentira, vuestra lengua habla maldad. No hay quien clame por la justicia, ni quien juzgue por la verdad. Confían en vanidad, y hablan vanidades; conciben maldad, y engendran iniquidad. Incuban huevos de áspid, y tejen telas de araña. El que come sus huevos, se muere; y si los aplastan, salen víboras. "Sus telas no sirven para vestir, ni se pueden cubrir con sus tejidos. Sus obras son inicuas, y actos de rapiña están en sus manos. Sus pies corren al mal, se apresuran a derramar sangre inocente. Sus pensamientos son pensamientos de iniquidad, destrucción y quebranto hay en sus caminos. No conocieron camino de paz, ni hay justicia en sus caminos. Sus veredas son torcidas, ninguno que ande por ellas conoce la paz. Por eso se alejó de nosotros la justicia, y no nos alcanzó la rectitud. Esperamos luz, y todo es tinieblas; resplandor, y andamos en oscuridad. Palpamos la pared como ciegos, y andamos a tientas como sin ojos. Tropezamos al mediodía como de noche, y estamos en oscuros lugares como muertos. Gruñimos como osos, y gemimos lastimeramente como palomas. Esperamos justicia, y no la hay; salvación, y se alejó de nosotros. (Isaías 59:1-11)

·                     "¿Por qué estamos sentados aquí? Juntaos, y entremos en las ciudades, a morir allí. Porque el Eterno nuestro Dios, ha decretado que muramos allí. Nos ha dado a beber hiel, porque pecamos contra él. "Esperamos paz, y no hubo bien; día de cura, y vendrá turbación. "Desde Dan se oye el bufido de sus caballos. Al relincho de sus corceles tiembla toda la tierra. Vienen a devorar el país y su abundancia, la ciudad y sus habitantes. "Yo envío sobre vosotros serpientes, áspides, contra los cuales no hay encantamiento, y os morderán" —dice el Eterno. (Jeremías 8:14-17)

 

Consecuencias de esperar

 

·                     Porque los malhechores serán exterminados, pero los que esperan en el Señor, heredarán la tierra. (Sal. 37:9)

·                     "¡Feliz el hombre que me oye, que vela a mis puertas cada día, y espera en el umbral de mi entrada!” (Prov. 8:34) Dice la Sabiduría que es Cristo.

·                     Nunca se oyó, ni ojo vio a ningún Dios fuera de ti, que hiciera tanto por quien espera en ti. (Isa. 64:4)

·                     Oh Eterno, sea tu constante amor sobre nosotros, tal como esperamos en ti. (Sal. 33:22)

·                     Sin embargo, aunque hablamos así, oh amados, de vosotros esperamos cosas mejores, conducentes a la salvación. Porque Dios no es injusto para olvidar vuestra obra y el trabajo de amor que habéis mostrado a su Nombre, habiendo servido a los santos, y sirviéndolos aún. (Hebreos 6:9-10)

·                     "Dios, perfecto es su camino, y acrisolada la Palabra del Señor; es escudo a los que en él esperan. (2 Samuel 22:31, Sal 18:30)

 

Toda Palabra de Dios es limpia, el Señor es escudo a los que esperan en él. (Prov. 30:5)

 

·                     Ninguno de cuantos en ti esperan será confundido. Serán avergonzados los que se rebelan sin causa. (Sal. 25:3)

·                     Pero el ojo del Eterno está sobre los que lo veneran, sobre los que esperan en su constante amor, para librarlos de la muerte, y conservarlos con vida en el hambre. (Sal 33:18-19)

·                     Sin embargo, el Eterno esperará para tener piedad de vosotros, y será exaltado para compadecerse de vosotros; porque el Señor es Dios de justicia. ¡Dichosos los que esperan en él! (Isaías 30:18)

·                     Los muchachos se fatigan y se cansan, los jóvenes flaquean y caen. Pero los que esperan al Eterno tendrán nuevas fuerzas, levantarán el vuelo como águilas; correrán, y no se cansarán; caminarán, y no se fatigarán. (Isaías 40:30-31)

·                     Así dice el Señor, el Eterno: "Yo tenderé mi mano a las naciones, y a los pueblos levantaré mi bandera. Y traerán en brazos a tus hijos, y tus hijas serán traídas en hombros. Reyes serán tus ayos y reinas tus niñeras. Con el rostro inclinado a tierra te adorarán, y lamerán el polvo de tus pies. Y conocerás que Yo Soy el Eterno. Y los que esperan en mí, no quedarán defraudados". (Isaías 49:22-23)

·                     Bueno es el Señor para los que esperan en él, para los que lo buscan (Lamentaciones 3:25)

·                     así también Cristo fue ofrecido una sola vez, para quitar los pecados de muchos. Y la segunda vez, sin relación con el pecado, aparecerá para salvar a los que lo esperan ansiosamente. (Hebreos 9:28)

 

ESTE ESTUDIO CONTIENE MAS MISTERIOS,… CLICK AQUI…

 

          flecha2  fecha   fecha

                     INICIO