La tierra de Judá será de espanto a Egipto
¿La
tierra de Judá es de espanto a Egipto,… porque al cortar de Israel al Justo y
al impío, la espada de Jesús sale contra toda carne,… y no hará reposar la
espada hasta que repose su ira?
“1Vino a
mí palabra de Jesús, diciendo: 2Hijo de
hombre, pon tu rostro contra Jerusalén, y derrama palabra sobre los santuarios, y profetiza contra la tierra de Israel. 3Dirás a la tierra de Israel: Así ha dicho Jesús: He aquí que yo estoy contra ti, y sacaré mi espada de su vaina,
y cortaré de ti al justo y al impío. 4Y por cuanto he de cortar de ti al justo y al impío, por tanto, mi espada saldrá de su
vaina contra toda carne, desde el sur hasta el norte. 5Y sabrá toda carne
que yo Jesús saqué mi
espada de
su vaina; no la envainaré más. 6Y tú, hijo de hombre, gime con quebrantamiento de
tus lomos y con amargura; gime delante de los ojos de ellos. 7Y cuando te
dijeren: ¿Por qué gimes tú? dirás: Por una noticia que cuando
llegue hará que desfallezca todo corazón, y toda mano se debilitará, y
se angustiará todo espíritu, y
toda rodilla será débil
como el agua; he aquí que viene, y se
hará, dice Jesús el Señor. 8Vino a mí palabra
de Jesús, diciendo: 9Hijo
de hombre, profetiza, y di: Así ha dicho Jesús el Señor: Di: La espada, la espada está afilada, y también pulida. 10Para
degollar víctimas está afilada,
pulida está para que relumbre. ¿Hemos de alegrarnos? Al cetro de mi
hijo ha despreciado como a un palo cualquiera. 11Y la dio a pulir para tenerla a mano; la espada está afilada,
y está pulida para entregarla en mano del
matador. 12Clama y lamenta, oh hijo de hombre;
porque ésta será sobre mi pueblo, será ella sobre todos los príncipes
de Israel; caerán ellos a espada
juntamente con mi pueblo; hiere, pues, tu muslo; 13porque está probado. ¿Y
qué, si la espada desprecia aun al cetro? El no será más, dice Jesús el Señor. 14Tú, pues, hijo de hombre, profetiza, y bate una mano contra otra, y
duplíquese y triplíquese el furor de la espada
homicida; esta es la espada de la gran
matanza que los traspasará, 15para que el corazón desmaye, y los estragos se multipliquen; en todas las puertas de ellos he puesto espanto de espada.
¡Ah! dispuesta está para que relumbre, y preparada para degollar. 16Corta
a la derecha, hiere a la izquierda, adonde quiera que te vuelvas. 17Y
yo también batiré mi mano contra mi
mano, y
haré reposar mi ira. Yo Jesús
he hablado.” (Eze. 21:1-17)