Clamarán a Jesús
¿Los
redimidos de Jesús,… que anduvieron perdidos por el desierto,
por la soledad sin camino,… cuando
clamaron a Jesús en su angustia, les libro de sus aflicciones y los dirigió
por camino derecho, para que fueren a ciudad habitable?
“2Díganlo los redimidos de Jesús, Los que ha redimido
del poder del enemigo,… 4Anduvieron perdidos por el desierto, por la
soledad sin camino, Sin hallar ciudad en donde
vivir. 5Hambrientos y sedientos, Su alma desfallecía
en ellos. 6Entonces clamaron a Jesús
en su angustia, Y los libró de sus aflicciones.
7Los dirigió por camino derecho,
Para que viniesen a ciudad habitable.
8Alaben la misericordia de Jesús, Y sus maravillas para con los
hijos de los hombres. 9Porque sacia al alma menesterosa,
Y llena de bien al alma hambrienta.” (Sal. 107:2-9)
¿Algunos de los redimidos de Jesús que ha redimido del
poder del enemigo,… han morado en sombras de muerte y cuando clamaron a
Jesús en su angustia, los libro de sus aflicciones, los saco de las tinieblas,
de sombras de la muerte y rompió sus prisiones?
“2Díganlo
los redimidos de Jesús, Los que ha redimido del poder del enemigo,… 10Algunos
moraban en tinieblas y sombra de muerte,
Aprisionados en aflicción y en hierros, 11Por cuanto fueron rebeldes
a las palabras de Jesús, Y
aborrecieron el consejo del Altísimo. 12Por eso quebrantó con el
trabajo sus corazones; Cayeron, y no hubo quien
los ayudase. 13Luego que clamaron
a Jesús en su angustia, Los libró de sus aflicciones; 14Los
sacó de las tinieblas y de la sombra de muerte,
Y rompió sus prisiones.” (Sal. 107:2-14)
¿Puede Jesús dirigir por camino derecho a los que están
perdidos en el desierto sin camino, sedientos,
hambrientos y desfalleciendo el alma, cuando claman a él,…?
“2Díganlo
los redimidos de Jesús, Los que ha
redimido del poder del enemigo, 3Y
los ha congregado de las tierras, Del oriente y del occidente, Del norte y del
sur. 4Anduvieron perdidos por el desierto, por la soledad sin camino, Sin hallar ciudad en donde vivir. 5Hambrientos
y sedientos, Su alma desfallecía en ellos. 6Entonces clamaron a Jesús en su angustia, Y los libró
de sus aflicciones. 7Los dirigió por camino
derecho, Para que viniesen a ciudad
habitable. 8Alaben la
misericordia de Jesús, Y sus maravillas para con los hijos de los hombres. 9Porque
sacia al alma menesterosa, Y llena de bien a la alma
hambrienta. (Sal. 107:2-9 Para ver que Jesús enseña el camino a
los pecadores, ver Sal. 25:8-10)
¿Quiénes son insensatos y puede Jesús oírles en la
angustia cuando a el le claman?
“17Fueron
afligidos los
insensatos, a causa del camino de su rebelión Y a causa de sus
maldades; 18Su alma abominó
todo alimento,
Y llegaron hasta las puertas de la muerte.
19Pero clamaron a Jesús en su angustia,
Y los libró de sus aflicciones. 20Envió su
palabra, y los sanó, Y los libró de su ruina. 21Alaben la misericordia de Jesús, Y sus maravillas
para con los hijos de los hombres” (Sal 107:17-22) ¿Cómo hay que clamar para que Jesús diga heme aquí? “6 3¿Por qué, dicen, ayunamos, y no hiciste
caso; humillamos nuestras almas, y no
te diste por entendido? He aquí que en
el día de vuestro ayuno buscáis vuestro propio gusto,
y oprimís a todos vuestros trabajadores.
4He aquí que para contiendas y debates ayunáis y para herir
con el puño
inicuamente; no ayunéis como hoy,
para que vuestra voz sea oída en lo alto. 5¿Es tal el
ayuno que yo escogí, que de día aflija el hombre su alma, que incline su cabeza como junco, y haga cama de cilicio
y de ceniza? ¿Llamaréis esto ayuno, y día agradable a Jesús?¿No es
más bien el ayuno que yo escogí, desatar las ligaduras
de impiedad, soltar las cargas de opresión, y dejar ir libres a los quebrantados,
y que rompáis todo yugo? 7¿No
es que partas tu
pan con el hambriento, y a los pobres
errantes albergues en casa;
que cuando veas al
desnudo, lo cubras, y no te escondas de tu
hermano? 8Entonces nacerá
tu luz como el alba, y tu salvación
se dejará ver pronto; e irá tu justicia delante de ti, y la gloria de Jesús será tu retaguardia. 9Entonces invocarás, y te oirá Jesús; clamarás, y dirá él: Heme aquí...” (Isa. 58:3-9)
¿Quién puede librar al
menesteroso que clamare y al afligido que no tuviere quien le socorra?
“1Oh
Dios, da tus juicios al rey, Y tu justicia al hijo
del rey,… 12Porque él
librará al menesteroso que clamare, Y al afligido
que no tuviere quien le socorra. 13Tendrá
misericordia del pobre y del menesteroso, Y salvará
la vida de los pobres.” (Sal. 72:1-12)
¿Qué paso a Efraín y a sus príncipes
cuando Jesús le redimió pero hablan mentira de él y no clamo con el corazón a
Jesús...?
“11Efraín fue como paloma incauta, sin entendimiento...13¡Ay de ellos!
porque se apartaron de mí;
destrucción vendrá sobre ellos, porque contra mí se rebelaron; yo los redimí, y ellos hablaron mentiras contra mí.
14Y no clamaron a mí con su corazón
cuando gritaban sobre sus camas; para el
trigo y el mosto (bien puede referirse a las uvas agrias Jer.
31:29-30) se congregaron, se rebelaron contra mí. 15Y aunque yo los
enseñé y fortalecí sus brazos, contra
mí pensaron mal. 16Volvieron, pero no al
Altísimo; fueron como arco engañoso; cayeron
sus príncipes
a espada por la soberbia de su lengua; esto será su escarnio en la tierra de Egipto.” (Oseas 7:11-16)