Huid de la tierra del norte

 

¿Cuando Jesús levante a David como Rey y hace juicio y justicia, es esos días será salvo Judá,… para ello Jesús hará subir a la descendencia de la casa de Israel de la tierra del norte,… y habitarán en su tierra?

 

5He aquí que vienen días, dice Jesús, en que levantaré a David renuevo justo, y reinará como Rey, el cual será dichoso, y hará juicio y justicia en la tierra. 6En sus días será salvo Judá, e Israel habitará confiado; y este será su nombre con el cual le llamarán: Jesús, justicia nuestra. 7Por tanto, he aquí que vienen días, dice Jesús, en que no dirán más: Vive Jesús que hizo subir a los hijos de Israel de la tierra de Egipto, 8sino: Vive Jesús que hizo subir y trajo la descendencia de la casa de Israel de tierra del norte, y de todas las tierras adonde yo los había echado; y habitarán en su tierra.” (Jer. 23:7-8)

 

¿Cuando Jesús hace volver a su pueblo el remanente de Israel, entre ellos cojos, ciegos, mujeres,… de la tierra del norte y de los confines de la tierra,… con misericordia los hace volver a los altos de Sion, haciéndoles andar junto a arroyos de aguas, y por camino derecho en el cual no tropiecen,… entonces se verá que el que espacio a Israel los reúne y los guarda como el pastor a su rebaño,… en aquellos tiempos, Jesús habrá redimido a Jacob, de la mano del mas fuerte que él, y vendrán con gritos de gozo en lo alto de Sion, y correrán al bien de Jesús, al pan, al vino, al aceite, y al ganado de las ovejas y de las vacas; y su alma será como huerto de riego, y nunca más tendrán dolor,… porque Jesús tendrá misericordia de Efraín?

 

7Porque así ha dicho Jesús: Regocijaos en Jacob con alegría, y dad voces de júbilo a la cabeza de naciones; haced oír, alabad, y decid: Oh Jesús, salva a tu pueblo, el remanente de Israel. 8He aquí yo los hago volver de la tierra del norte, y los reuniré de los fines de la tierra, y entre ellos ciegos y cojos, la mujer que está encinta y la que dio a luz juntamente; en gran compañía volverán acá. 9Irán con lloro, mas con misericordia los haré volver, y los haré andar junto a arroyos de aguas, por camino derecho en el cual no tropezarán; porque soy a Israel por padre, y Efraín es mi primogénito. 10Oíd palabra de Jesús, oh naciones, y hacedlo saber en las costas que están lejos, y decid: El que esparció a Israel lo reunirá y guardará, como el pastor a su rebaño. 11Porque Jesús redimió a Jacob, lo redimió de mano del más fuerte que él. 12Y vendrán con gritos de gozo en lo alto de Sion, y correrán al bien de Jesús, al pan, al vino, al aceite, y al ganado de las ovejas y de las vacas; y su alma será como huerto de riego, y nunca más tendrán dolor. 13Entonces la virgen se alegrará en la danza, los jóvenes y los viejos juntamente; y cambiaré su lloro en gozo, y los consolaré, y los alegraré de su dolor. 14Y el alma del sacerdote satisfaré con abundancia, y mi pueblo será saciado de mi bien, dice Jesús. 15Así ha dicho Jesús: Voz fue oída en Ramá, llanto y lloro amargo; Raquel [en hebreo es Râjêl, "oveja"] que lamenta por sus hijos, y no quiso ser consolada acerca de sus hijos, porque perecieron. 16Así ha dicho Jesús: Reprime del llanto tu voz, y de las lágrimas tus ojos; porque salario hay para tu trabajo, dice Jesús, y volverán de la tierra del enemigo. 17Esperanza hay también para tu porvenir, dice Jesús, y los hijos volverán a su propia tierra. 18Escuchando, he oído a Efraín que se lamentaba: Me azotaste, y fui castigado como novillo indómito; conviérteme, y seré convertido, porque tú eres Jesús mi Dios. 19Porque después que me aparté tuve arrepentimiento, y después que reconocí mi falta, herí mi muslo; me avergoncé y me confundí, porque llevé la afrenta de mi juventud. 20¿No es Efraín hijo precioso para mí? ¿no es niño en quien me deleito? pues desde que hablé de él, me he acordado de él constantemente. Por eso mis entrañas se conmovieron por él; ciertamente tendré de él misericordia, dice Jesús.” (Jer. 31:7-14)

 

flecha2