No les desamparare... Daré en el Desierto
¿Cuál es el propósito de Jesús al llevar al que no
es pueblo suyo,... al desierto y darle viñas y el valle de Acor; cuando a Jesús no se le llame
Señor si no Marido y quite de la tierra arco y espada y guerra...?
“4Pero
he aquí que yo la atraeré y la llevaré al
desierto, y hablaré a su corazón.
15Y le daré sus viñas desde
allí, y el valle de Acor (donde se apedreó y quemo todo lo malo. Josué 7:24-26) por
puerta de esperanza; y allí cantará
como en los tiempos de su juventud, y como en el día de su subida de
la tierra de Egipto. 16En aquel tiempo, dice Jesús, me llamarás Ishi (En hebreo marido), y nunca más me
llamarás Baali (En hebreo
Señor). “17Porque
quitaré de su boca los nombres de los baales, y nunca más se mencionarán sus nombres. 18En
aquel tiempo haré para ti pacto con las bestias del campo, con
las aves del cielo y con las serpientes de la tierra; y quitaré
de la tierra arco y espada y guerra, y te haré dormir segura.
19Y te desposaré conmigo para siempre; te
desposaré conmigo en justicia, juicio,
benignidad y misericordia. 20Y te desposaré conmigo en fidelidad,
y conocerás a Jesús. 21En aquel tiempo responderé, dice Jesús, yo responderé a los cielos, y ellos responderán a la
tierra. 22Y la tierra responderá al trigo, al vino y al aceite, y ellos
responderán a Jezreel (En hebreo simiente de Dios). 23Y la
sembraré para mí en la tierra, y tendré
misericordia de Lo-ruhama (En
hebreo: No compadecida); y diré a Lo-ammi (en hebreo: No
pueblo mío): Tú
eres pueblo mío, y él dirá: Dios mío.” (Oseas 2:14-23)
¿Qué hace Jesús con los hijos de los hombres perdidos y abatidos
en el desierto cuando a él claman?
“2Díganlo los redimidos de Jesús, Los que ha redimido del poder del enemigo, 3Y los ha congregado de las tierras, Del oriente y del occidente, Del norte y del sur. 4Anduvieron perdidos por el desierto, por la soledad sin camino, Sin hallar ciudad en donde vivir. 5Hambrientos y sedientos, Su alma desfallecía en ellos. 6Entonces clamaron a Jesús en su angustia, Y los libró de sus aflicciones. 7Los dirigió por camino derecho, Para que viniesen a ciudad habitable. 8Alaben la misericordia de Jesús, Y sus maravillas para con los hijos de los hombres. 9Porque sacia al alma menesterosa, Y llena de bien a la alma hambrienta. 10Algunos moraban en tinieblas y sombra de muerte, Aprisionados en aflicción y en hierros, 11Por cuanto fueron rebeldes a las palabras de Jesús, Y aborrecieron el consejo del Altísimo. 12Por eso quebrantó con el trabajo sus corazones; Cayeron, y no hubo quien los ayudase. 13Luego que clamaron a Jesús en su angustia, Los libró de sus aflicciones; 14Los sacó de las tinieblas y de la sombra de muerte, Y rompió sus prisiones. 15Alaben la misericordia de Jesús, Y sus maravillas para con los hijos de los hombres. 16Porque quebrantó las puertas de bronce, Y desmenuzó los cerrojos de hierro. (Sal. 107:2-16)