La
impiedad
¿Tiene que reposar la vara de
impiedad sobre la heredad de los justos?
“3Porque
no reposará la vara de la impiedad
sobre la heredad de los justos; No sea que extiendan los justos sus manos a la iniquidad.” (Sal. 125:3; Tito 2:11-12 Para
ver si Hay diferencia en los que practican la impiedad y los que no le
practican ver. Mal. 3:13-18;
Isa. 3:10-11; Amos 9:8; Sal. 92:6-7; Rom 1:18-32) ¿El verdadero ayuno implica el desatar las ligaduras de impiedad,… para
que la gloria de Jesús sea la retaguardia? “5¿Es tal el ayuno que yo escogí, que de día aflija el hombre su alma, que
incline su cabeza como junco, y
haga cama de cilicio y de ceniza?... 6¿No es más bien el ayuno que yo escogí, desatar las ligaduras de impiedad, soltar las cargas de opresión,… 8Entonces
nacerá tu luz como el alba,… y la gloria de Jesús será tu
retaguardia.” (Isa. 58:5-8)
¿Qué hace la impiedad al pecador?
“6La justicia guarda al de
perfecto camino; Mas la impiedad
trastornará al pecador.” (Prov. 13:6)
¿Cuándo reina un rey y príncipes
presiden en juicio,… y los ojos de los que ven no sean ofuscados y los oídos de
los que oyen oigan atentos,… el corazón de los necios entenderá para saber, y
la lengua de los tartamudos hablará rápida y claramente,… y el ruin nunca más
será llamado generoso,… porque el ruin hablará ruindades, y su
corazón fabricará iniquidad, para cometer impiedad?
“1He aquí que para justicia reinará un rey, y príncipes presidirán en juicio,... 3No se ofuscarán entonces los ojos de los que ven, y los oídos de los oyentes oirán atentos.
4Y el corazón de los necios entenderá para saber, y la
lengua de los tartamudos hablará rápida
y claramente. 5El ruin
nunca más será llamado generoso,
ni el tramposo será llamado espléndido. 6Porque
el ruin hablará ruindades, y su corazón fabricará iniquidad, para cometer impiedad y para hablar escarnio contra Jesús, dejando vacía el alma hambrienta, y quitando la bebida
al sediento.” (Isa. 32:1-6)
¿Hay que amonestar al impío,… para
que se convierta de la impiedad y de su mal camino,... para salvar de la muerte
el alma de él y librar el alma de uno?
“16Y aconteció que al
cabo de los siete días vino a mí palabra de Jesús, diciendo: 17Hijo
de hombre, yo te he puesto por atalaya a la casa de Israel; oirás, pues, tú la
palabra de mi boca, y los amonestarás de mi parte. 18Cuando yo dijere al impío: De cierto morirás; y tú no le amonestares ni le hablares, para que
el impío sea apercibido de su mal camino a fin de que viva, el impío morirá por
su maldad, pero su sangre demandaré de tu mano. 19Pero si tú amonestares al impío, y él no se convirtiere de su impiedad y de su mal camino, él
morirá por su maldad, pero tú habrás librado tu alma.” (Eze. 3:16-19)
¿Qué pasará con el impío por su
impiedad?
“5La justicia del
perfecto enderezará su camino; Mas el impío
por su impiedad caerá.” (Prov. 11:5 Para ver como se aplica este
versículo a Israel ver, Eze. 18:1-20; Eze. 33:12-20) ¿Qué le
aconteció a Jerusalén por convertir las ordenanzas y decretos de Dios,… en
impiedad más que las tierras que están alrededor de ella? “5Así ha dicho Jesús el Señor: Esta es Jerusalén; la puse en medio de las
naciones y de las tierras alrededor de ella. 6Y ella cambió mis decretos y mis ordenanzas en impiedad más que las naciones, y más que las tierras que están alrededor de ella;
porque desecharon mis decretos y mis
mandamientos, y no anduvieron en
ellos. 7Por tanto, así ha dicho Jesús: ¿Por haberos
multiplicado más que las naciones que están alrededor de vosotros, no habéis andado en mis mandamientos, ni
habéis guardado mis leyes? Ni aun según las leyes de las naciones que
están alrededor de vosotros habéis andado. 8Así, pues, ha dicho
Jesús el Señor: He aquí yo estoy
contra ti; sí, yo, y haré juicios en medio de ti ante los ojos de las naciones.
9Y haré en ti lo que nunca hice,
ni jamás haré cosa semejante, a causa de todas tus abominaciones. 10Por eso los padres comerán a los hijos en medio de
ti, y los hijos comerán a sus padres; y haré en ti juicios, y esparciré a todos
los vientos todo lo que quedare de ti. 11Por tanto, vivo yo,
dice Jesús el Señor, ciertamente por haber profanado mi santuario con todas tus abominaciones, te quebrantaré
yo también; mi ojo no perdonará, ni tampoco tendré yo misericordia. 12Una tercera parte de ti
morirá de pestilencia y será consumida
de hambre en medio de ti; y una
tercera parte caerá a espada
alrededor de ti; y una tercera
parte esparciré a todos los
vientos, y tras ellos desenvainaré espada.” (Eze. 5:5-12 ver también,
Oseas 10:9-15) ¿Qué
relación se puede encontrar lo que le paso a Jerusalén, con la sentencia que
Dios ha pronunciado sobre toda la tierra? “7Levántate, oh espada, contra el pastor, y contra el hombre
compañero mío, dice Jesús de los ejércitos. Hiere al pastor, y serán dispersadas las ovejas; y haré volver mi
mano contra los pequeñitos. 8Y acontecerá en toda la tierra, dice Jesús, que las dos terceras partes serán cortadas en
ella, y se perderán; mas la tercera quedará en ella. 9Y
meteré en el fuego a la tercera parte, y los fundiré como se funde la plata, y
los probaré como se prueba el oro. El invocará mi nombre, y yo le oiré, y diré: Pueblo mío; y él dirá:
Jesús es mi Dios.” (Zac. 13:7-9; Amos 9:8-10; Para ver que la mano de
Jesús a estado presente siempre asolándola impío ver Isa. 26:11)
¿Si en la casa del impío hay
tesoros de impiedad y medida escasa,… Jesús le dará por inocente,… cual es el
castigo que tiene preparado para ellos?
“9La voz de Jesús clama a la ciudad; es sabio temer a tu
nombre. Prestad atención al castigo, y
a quien lo establece. 10¿Hay aún en casa del impío tesoros de
impiedad, y medida escasa que es detestable? 11¿Daré por inocente al que tiene balanza falsa
y bolsa de pesas engañosas? 12Sus ricos se colmaron de rapiña,
y sus moradores hablaron mentira,
y su lengua es engañosa en su
boca. 13Por eso yo también te
hice enflaquecer hiriéndote, asolándote por tus pecados. 14Comerás, y no te saciarás, y tu
abatimiento estará en medio de ti; recogerás,
mas no salvarás, y lo que salvares, lo entregaré yo a la espada. 15Sembrarás, mas no segarás; pisarás aceitunas, mas no te ungirás
con el aceite; y mosto, mas no beberás el vino. 16Porque los mandamientos de Omri se han
guardado, y toda obra de la casa de
Acab; y en los consejos de ellos
anduvisteis, para que yo te
pusiese en asolamiento, y tus moradores para burla. Llevaréis, por
tanto, el oprobio de mi pueblo.”
(Miq. 6:9-16; Mal. 1:4-5. Para ver las obras
de la casa de Acab ver: 1Rey 16:29-33; 2Cro 21:13 Para ver por que Dios
no castigo a Acab sino a sus
hijos ver, 1Rey 21:20-29)
¿Cómo
evitar la impiedad?
“16Mas evita profanas y vanas palabrerías, porque conducirán más y más a la impiedad.” (2Tim 2:16)